Dejando atrás Ubrique por un camino pedregoso, vestigio de la época romana
Vacas, terneros, gallinas, cabras,...
En el espectacular ascenso al Puerto de Don Fernando, la senda se abre paso a través de un continuo zigzag
El paraíso de la piedra caliza
Una solitaria encina rodeada de los majanos dispersos por el prado
La encina, proveedora del alimento del ganado porcino que se encontraba por los alrededores
Increible tronco del Quejigo
Aristas cortantes del roquedo calizo
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